miércoles, 10 de octubre de 2012
TQ
Te quiero.
Te sigo queriendo con este amor que tanto duele enmarcado en tu ausencia.
Hoy no me importan las palabras, las tergiversaciones ni los malos entendidos.
Te quiero con la verdad desnuda, sin contemplaciones.
No importa nada más, no importa el resto del mundo, ni las murmuraciones, ni los afectos de los que te quieren y los otros que quiero.
Te quiero intensamente, como soy, como nunca he sido para nadie, sin aristas ni bordes para no dañarte.
Te quiero como nunca te dije, como te quise siempre, como no concibes que te quiera.
Si hubiera una promesa
entre tú y yo, una cita
prorrogada, una luz allá a lo lejos
con que poder guiarme;
si quedase esperanza
- aunque fuese una triste
diminuta esperanza -;
si alguna vez tus labios
hubiesen pronunciado
la palabra mortal que yo anhelaba,
o algo que me sonara parecido,
pienso que aún hallaría
razón para aguardarte.
¿Y quién sabe si el trueque de la carne
no fue, de alguna forma, una promesa?
Josefa Parra (Alcoba de Agua)
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